Daruma 達磨 es el Muñeco de los Propósitos, un amuleto japonés de la buena suerte. Hecho con papel maché, es una representación del monje Bodhidharma, fundador del budismo zen. Dice la leyenda que este alcanzó la iluminación después de meditar en una cueva durante 9 años pero que se le cayeron los brazos y piernas por atrofia. De allí la forma peculiar de Daruma.
Cómo proceder
Elegimos un propósito y le pintamos un ojo a Daruma. Cuando lo consigamos, le pintaremos el otro ojo en señal de gratitud. A modo de aprendizaje, apuntaremos la manera cómo hemos logrado nuestro objetivo, sintiendo en ese momento un gran satisfacción personal. Si no conseguimos nuestro propósito, podremos quemar nuestro Daruma a finales de año: significa simplemente que buscaremos otros medios para alcanzarlo.
Sobre el espíritu de Daruma
Su figura nos sirve para recordar que con determinación y perseverancia, conseguiremos el propósito que nos hayamos marcado. En este sentido, es muy importante que escojamos un objetivo específico y que sea alcanzable. No se trata de comprar un Daruma para luego esperar a que se cumpla nuestro deseo por arte de magia: Daruma nos motiva para trabajar duro y esforzarnos. Para los japoneses, cualquier ocasión es buena para regalar un Daruma; eso sí, hay fechas muy simbólicas como los cumpleaños y el Año Nuevo.
El Daruma rojo se utiliza para todo tipo de objetivos. ¿Ya sabes qué propósito vas a trabajar con él?
Made in Japan
Características técnicas: papel maché |